Hay recursos que aumentan con el uso, y uno de ellos es la amistad. Este mensaje del libro de Looby Macnamara «Permacultura y Gente» se me quedó grabado y resonó en mi cabeza mucho después de que terminé de leerlo. Hay mucha verdad en esto: con cada interacción, palabra amable o atención que damos, la amistad se hace más profunda y rica. Cuando invertimos tiempo, energía y cuidado genuino, se convierte en un recurso invaluable en nuestras vidas, brindándonos amor, apoyo y aceptación.
Y los últimos días he estado viviendo el principio permacultural del «cuidado de las personas», cuando cuatro amigos me visitaron en Barcelona. Pasamos un tiempo maravilloso e intenso juntos, paseando por la ciudad, caminando por las montañas y simplemente abrazándonos y compartiendo lo que está sucediendo actualmente en nuestras vidas y lo que tenemos en mente. Lo que queda ahora que se han ido es mucha gratitud, mucha gratitud, energía y calidez, y la repentina sensación de necesitar un poco de espacio para mí de nuevo. Y eso es lo que estoy haciendo ahora: encontrar un poco de silencio, respirar conscientemente y cuidarme.
¡Hasta luego!